¿Por qué nos pica la garganta cuando tomamos bebidas gaseosas?

La explicación hay que buscarla en un gen. El equipo de la doctora Emily Liman, de la Universidad del Sur de California, ha comprobado que el dióxido de carbono presente en las bebidas gaseosas es capaz de activar unos receptores sensitivos que hay en la cavidad nasal. Estos receptores son sensibles al dolor, a la presión cutanea y a la temperatura buconasal, todos estos estímulos son los responsables de la sensación de hormigueo intenso o incluso de ardor que tenemos en la garganta cuando bebemos una bebida con gas con demasiada rapidez. La investigadora ha puesto de manifiesto que las células que responden a la carbonatación son aquellas que expresan un gen llamado TRPA1. A nivel experimental se ha comprobado que aquellos ratones que carecen del gen TRPA1 tienen una respuesta muy escasa al dióxido de carbono, en otras palabras que no les pica la bebida gaseosa; mientras que la incorporación al código genético del TRPA1 hace que las células sean capaces de reaccionar al gas.

Pharm.